separacion

Cosas que recuerdo de la separación de mis padres

Mis padres se separaron cuando yo tenía 5 años. Recuerdo pocas cosas del piso en el que vivimos ese tiempo juntos los 3… Recuerdo que era grande y bonito y que estaba a dos pasos de mi escuela infantil.

Recuerdo que un día se nos escaparon los 3 hamsters que tenía y que los encontramos escondidos dentro de zapatos. O las clases de guitarra que daba mi madre, y también recuerdo que muchos días venían amigos de mi padre que me hacían jugar.

Recuerdo el día que llegó la cama nueva para mi habitación y recuerdo que a partir de la separación yo empecé a dormir con mi madre cuando estaba con ella, y con mi padre cuando estaba con él.

Tuve suerte: a mi mejor amiga le pasó lo mismo y supongo que eso nos unió un montón. Éramos las dos únicas niñas con padres separados de todo el cole y esto, impacta, claro. Pero lo vivimos, creo, como algo que nos hacía especiales y distintas al resto, no en negativo, sino al contrario. A pesar de que luego, cada una, en la oscuridad de la noche, quizás, lo llorásemos.

De esa época recuerdo la logística: el tener que pensar qué te llevabas a casa de uno o del otro, teniendo en cuenta los deberes y si te tocaba gimnasia o no. Nunca me gustó ir con la mochila a petar, arriba y abajo, y no me gustaba que, cuando me regalaban un póster, tener que elegir en qué habitación lo colgaría. Escoger… siempre escoger… quizás por eso años más tarde, en mi adolescencia, por según qué cosas me costaba tanto decidirme…

Recuerdo la sensación de echar siempre de menos a uno de los dos. Si me lo pasaba bien con uno, sentía que el otro no podría verlo. Y viceversa. Si me lo pasaba mal, sentía que necesitaba al otro para acompañarme. Sentir que siempre faltaba uno. Recuerdo mis enfados, mis mal humores.

Todo esto lo viví sin darme cuenta, lo sentí, pero sin ser consciente de ello. Fue con los años, que pude poner nombre a lo que había vivido y sentido durante tantos años.

De esa época recuerdo otra cosa: que mis padres nunca jamás se pelearon o yo, al menos, nunca lo vi. Siempre hablaron las mil maravillas el uno del otro y todavía es así hoy en día. Mi madre siempre dice que es el mejor exmarido del mundo!

Fue con el tiempo, que me di cuenta de lo importante que era que hubieran tenido una buena relación. Hasta entonces pensaba que, que una expareja se tratara bien y se apreciara, era lo normal y luego vi lo excepcional de su trato.

Es algo que les agradeceré toda la vida. El sentir que entre ellos no había rencor y que, en lugar de eso, había sólo admiración y amor del bueno.

De esa época también recuerdo el apoyo que supusieron para mi sus nuevas parejas, que siguen siendo sus actuales parejas. Recuerdo lo muy querida que me sentí, como si aceptaran el pack completo y con gusto. Me adoptaron, tal cual.

Depende de en qué contexto, el ser tan distinta al resto (nadie tenía 4 padres como yo aparte de mi amiga) sentía un poco de vergüenza y reconozco que en alguna ocasión incluso mentí y dije pertenecer a una familia como la suya; de papá y mamá juntos. A veces era más fácil acabar una conversación así que tener que explicar toda la odisea… porque en esa época eso era una odisea a ojos de los demás.

A medida que fui creciendo esa vergüenza ocasional pasó a ser orgullo. Orgullo de tener 2 madres y 2 padres que me querían un montón.

Jamás hablamos de la separación con mi padre… hasta ese día.

Yo hacía un par de días que había dejado una relación larga. Tenía unos veintipico años. Y me entró eso que entra cuando estás en el duelo de cualquier relación: una llorera de no poder parar.

Había vuelto a vivir con mi madre pero ella ese día no estaba. Se ve que llamó a mi padre y le dijo que estuviera al tanto, que yo no estaba bien.

Tardó nada en llamarme y yo no pude ni hablar. Entonces él sólo dijo “en 30 minutos estoy aquí” (lo que tardaba en conducir a casa de mi madre), y colgó.

Ese día, en el comedor, hablamos durante horas y de temas que nunca habíamos tocado antes. Y salió su separación.

Me dijo algo que recordaré toda la vida y que me ha servido muchísimo después: que el amor es muy importante, pero que hay otra cosa que también lo es y que no puede ignorarse en una relación ni en nada, y es la libertad.

La libertad de elegir qué quieres, con quién, de qué forma, y en qué momento. La libertad de decidir qué termina y cuándo. La libertad de ser.

Y que si se entiende este concepto de libertad, nadie puede enfadarse en una relación… porque a veces, simplemente, hay que volar en direcciones distintas.

Desde entonces creo que no he sido jamás tan libre. Aplico este aprendizaje en cada área de mi vida y me hace feliz.

Pero… por qué te cuento hoy todo esto. La verdad, no lo sé. Pero me han venido recuerdos de esa etapa, al ver la foto de mi padre llevándome a hombros. 

Porque quizás estás en una relación y no eres libre. O quizás lo estás porque sí lo eres y quieres estar ahí. O porque quizás ya te has separado y te preguntas cómo lo debe vivir tu hijo, o quizás porque tus padres se separaron y todavía hay polvo debajo de la alfombra…

Últimamente he vivido muchas separaciones a mi alrededor tanto a nivel personal como profesional y si algo tengo claro es que este año quiero hablar de separaciones, de emociones y de niños a los que les cambia el mundo tal y como lo conocían.

Ojalá mi experiencia vivida, sufrida y luego también, llorada, aceptada y situada en el lugar que le corresponde, os pueda ayudar en este y en otros posts que escribiré.

¿Tienes alguna experiencia al respecto? ¿Te ha tocado en algo este texto?

PD: ¿Se nota que nunca me ha gustado disfrazarme?

Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn
Picture of Míriam Tirado

Míriam Tirado

Consultora de crianza consciente y periodista especializada en maternidad, paternidad y crianza. Me dedico a ayudar a madres y padres a conectar con sus hijos/as.

30 comentarios

  1. Te sigo en Facebook desde hace…. alrededor de un año y medio. Me encanta leerte, me ayuda mucho.
    ¡Pero hoy especialmente!

    No estoy en proceso de separación, estoy en proceso de tomar una decisión: nos separamos o luchamos. Tengo dos hijos, y el alma rota. De momento estoy perdida y muerta de miedo. No quiero hacerles daño, no quiero hacerlo mal.

    No puedo decir que al leerte todas las dudas se me han aclarado. Pero sí al menos me has dado esperanza.

    Muchas gracias por compartir todo esto. Es muy grande

      1. Hola, pues dependerá especialmente de las relaciones que haya entre hijos-padres/madres y las nuevas parejas, pero yo creo que sí. Yo tengo recuerdo de las bodas de mis padres con sus parejas y son recuerdos súper bonitos e importantes para mí porque fui muy feliz de poder ver y vivir esas fiestas. Un abrazo.

  2. Mas que sufrir la separación, en mi caso sufrí una convivencia conflictiva. Lo que cuentas lo siento tan ajeno… Por unas razones u otras mis padres decidieron esperar, aguantar, y el resultado al final es catastrófico para todos. La separación se produjo cuando yo ya era mayor, tenía 28 años, y yo sentí mucho alivio. Aunque finalmente el proceso no fue nada agradable para ninguno.
    No culpo a nadie, cada uno hace las cosas lo mejor que puede, pero por lo vivido, siempre defenderé una separación a tiempo, que vivir en un ambiente negativo y conflictivo, creo que hace mil veces más daño que un divorcio.

    1. En ningún caso defendía yo nada, ¿eh?! Sólo explicaba mi experiencia. Y hay de todo, como siempre. Divorcios horribles que dejan secuelas de por vida, y otros que no, convivencias felices y otras que son un puro infierno. Gracias por contar tu experiencia. Siento que lo pasaras tan mal. Un abrazo.

      1. Nooo, no me refería a que defendieses nada, a lo mejor me he expresado mal, disculpa. En realidad solo sentí la necesidad de compartir lo que viví y la conclusión que yo saqué de lo vivido, ya que hablamos de separaciones y divorcios.
        Lo que cuentas lo siento ajeno pero lo digo con «nostalgia» de no haber sentido a mis padres así de cercanos tras la separación.
        Un abrazo.

  3. soy madre d un hijo 2y medio. estoy pasando por un mal momento..ya no siento que su padre nos vea como una familia, no hace mas k reprochar cualwuier complicacion d la crianza, incluso he tenido wue soportar tener que escuchar que fui un error en su vida tener un hijo conmigo, aun dandole toda libertad, k piense eso de mi, duele.me pongo en el lugar de mi hijo, lo mas importante, y me desepera que vea esta situacion, desde que nacio no conoce lo que es el cariño que se tienen sus padres,, loncontrario, es por eso k le doy toda razon a tu padre.no puedes obligar a una persona k t kiera.si en realidad no lo siente asi, no puedes dejar ke el tiempo pase y este encerrada en una jaula dond no esta comodo…envido esa relacion d tus padres..ojala lo llevemos d la misma forma.pero cuando hay tantas heridas,.dificil se podra llevar con respeto y empatia..gracias por el post….m ha dado k pensar…

    1. Loles, por eso justamente es importante no dejar que la cosa se atrofie mucho. No esperar a odiarse para separarse. Hacerlo cuando todavía hay aprecio y estima. Sino, luego se puede pasar al odio fácilmente y desde ahí es todo mucho más difícil. Siento que estés viviendo todo lo que has contado. Te mando un fuerte abrazo.

  4. He leído el post y llorando como una magdalena estoy… me separé hace 7 meses (bueno mi marido me dejó, en un principio porque se le había acabado el amor, en un final porque ya estaba con otra). Aun a día de hoy me culpo por algo que yo no decidí pero asumo que es lo mejor que podía pasar, pero para nosotros y ¿para mi pequeña? No se que pensará no se que sentirá, ella es feliz me dicen todos… si, lo sé pero al leerte me has hecho plantear si extrañará su vida anterior en la que sus padres estaban unidos. Yo solo vivo por y para ella y aunque parezca extraño saco fuerzas a diario para llevarme bien con mi ex marido por y para ella, se lo debo. No quiero que crezca con la sensación de que no nos soportamos. En fin es tan complicado saber como actuar en estos casos que siempre queda la incertidumbre de si haremos bien o mal, piesno que todo lo que se haga desde el corazón será bueno para nuestros hijos.
    Gracias por el post.

    1. Sin duda… Intenta ser feliz, pensar también en ti, que lo debes de haber pasado muy mal… cuidarte. De esta forma, si tu estás bien, ella seguramente también lo estará. Un abrazo fuerte. Gracias por abrirte aquí.

  5. Hola Miriam
    Te escribo desde Argentina y soy una seguidora de todo tus trabajos que con tanta generosidad vuelcas para las personas que te escuchan.
    Que interesante y saludable fue la experiencia de separación de tus padres pero no siempre se puede terminar una relacion asi.
    Por mi experiencia personal he pasado por un proceso doloroso de separacion y por lo tanto mis hijos también pero hoy puedo darme cuenta de tantas cosas que inevitablemente sucedieron pero que se pueden reparar y espero que a mis hijos les sirva como un aprendizaje de vida.
    Gracias por tu transparencia, espontaneidad y por compartir ésta intimidad que me emociona
    Carmen

  6. Mi pareja me dejo antes de nacer nuestra hija. Por lo que para ella que cada uno vivamos en pisos distintos es lo normal. Aun asi, ella siempre prefiere hacer las cosas los tres juntos. Por suerte continuamos llevandonos muy bien, de primeras fue una decision por la niña que no queriamos que nos viera peleando, luego fue porque son muchos años de pareja, de querernos y aunque esto ha cambiado la amistad que ha crecido en estos años no se puede evaporar y somos grandes amigos que podemos estar horas hablando (cuando la niña duerme sino imposible ) y espero que sea siempre asi. A mi lo que me da mas miedo son las nuevas parejas, porque no todas van a aceptar nuestra buena relacion.

  7. Hola Miriam!
    Jo m estic divorciant i tinc una nena de quasi tres anys que, a mes de viure la separació, acaba de començar el cole.

    Ella està tranquila la Major part del temps però no fa vas quan lo dic el que pot Fer i el que no.

    A més, el seu pare la ve a veure molt molt poc….

    Jo tinc el cor trencat i ahora fort, perquè sé que ella depèn només de mí, ara.

    Gràcies pel post!

  8. Miriam me encanta leerte, porque siempre menaportas algo bueno. En este caso me ha gustado mucho porque aunque vivo en pareja hace unos 13 años, hemos pasado por varios altibajos y siempre hemos tenido claro como queriamos hacer las cosas, por nuestras hijas, y por nosotros.
    Gracias!!!

  9. Gracias Míriam. Gracias por abrirte y contar vivencias y sentimientos tan personales. Mi pareja y yo estamos en una fase de análisis de nuestra relación y me ayuda un montón leer tu testimonio. También tengo la mala experiencia de la separación de mis padres, ya hace años, pero que continúa con un odio enquistado. Qué bien ver que es posible otra forma de hacer las cosas!

  10. Míriam,
    Com a company teu a l’escola et diria que si, que vas ser una companya i amiga especial, pero ho vas ser per tu mateixa, per les teves virtuts i empatia. Segur que les circumstàncies et van modelar, pero tu ja eres algu especial .
    Una abraçada,
    Xavi Martín .

  11. Jo, ara tinc 42 anys i també els meus pares es van separar quan tenia 5 anys, i puc dir que m’ha marcat tota la vida, tot el que sóc i el que faig ho faig pensant en que els meus fills no passin pel mateix. La falta d’estabilitat quan ets petit, a mi em va afectar mlt, aquest tema és el meu punt feble…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre Protección de Datos

  • Responsable: MIRIAM TIRADO TORRAS
  • Objetivo: Publicar el comentario en relación a la noticia.
  • Legitimización: Consentimiento del interesado.
  • Dirección: No se prevén cesiones, excepto por obligación legal o requerimiento judicial.
  • Derechos: Acceso, rectificación, supresión, oposición, limitación, portabilidad, revocación del consentimiento. Si considera que el tratamiento de sus datos no se ajusta a la normativa, puede acudir a la Autoridad de Control (www.aepd.es).
  • Más información: https://www.miriamtirado.com/politica-de-privacidad/

 

Artículos relacionados