27.7.2011
Querido Sentido Común,
En primer lugar quiero disculparme. Tengo la sensación de que a lo largo de mi vida quizás no te he valorado como en realidad te merecías. Ha sido más tarde, y gracias a la crianza de mi hija, que me he dado cuenta de como eres de importante en la vida. Creo que en general, en este mundo en el que vivimos, no se te valora lo suficiente. Sí, a menudo se habla de ti, pero no sé si de verdad sabemos como eres de importante y que fáciles que son las cosas cuando te tenemos presente cada día.
Para mí, desde hace dos años, tú y tu compañero, el Ponerse en el Lugar del Otro, que también está totalmente infravalorado, me sois de gran ayuda. Me permitisteis entender a mi hija cuando era muy pequeñita y evidentemente, no me podía explicar, con palabras, que me pedía. No era consciente de que os necesitaba tanto hasta que fui madre. Y por eso, de alguna manera, me siento un poco culpable y no me puedo creer que no os haya tenido más cerca mucho antes, sobre todo en la adolescencia y en el inicio de la edad adulta. Pero supongo que también debe ser normal y me consta que tenéis paciencia y que no me lo vais a tener en cuenta.
En cada situación de duda, siempre has estado a mi lado, diciéndome: «Para un momento, utilízame antes de preocuparte y buscar soluciones quizás equivocadas». Gracias por estar ahí. Tú, Sentido Común, y tu compañero Ponerse en el Lugar del Otro, me habéis permitido saber qué tenía que ir haciendo en cada momento y resultaba, porque conseguía calmar el dolor de mi hija, la añoranza, el nerviosismo, el hambre, o lo que fuera que tuviera cuando era bebé. Evidentemente, también me ayudáis mucho ahora, no tengáis ninguna duda al respecto. Instinto, no te pongas celoso, que a ti te he tenido presente desde el primer día!
Por ejemplo, ahora que hace ya un mes que trabajo y por las noches no estoy en casa, Laia ha empezado a no parecerle bien algún día. Dice que no quiere ir a dormir y hace el remolón más de lo habitual. Tú, Sentido Común, me has hecho ver que debe estar un poco enfadada. Y tu compañero, Ponerse en el Lugar del Otro, me habéis hecho dar cuenta de que a mí me pasaría lo mismo, si mi compañero se fuera una semana fuera, pues no pasaría nada y podría soportar que no viniera a dormir durante unos días. Pero si cada semana, se pasara media semana fuera y no lo tuviera cerca, a un lado de la cama, seguro que tampoco me gustaría. Gracias a vosotros puedo entender a mi hija y puedo acompañarla. Decirle que la entiendo, que es normal, que pasará, que tengo que trabajar porque es necesario, que ya me gustaría dormir todas las noches con ella!… pero que no se preocupe porque lo más importante es que la quiero mucho, muchísimo, y estoy con ella aunque no me pueda tocar.
Creo que a veces leemos demasiados libros, hacemos caso a demasiados expertos y gente entendida, buscamos soluciones donde quizá no se necesitan soluciones… todo, porque os tenemos poco presentes. A ti, Sentido Común, por supuesto, y hay gente que te aseguro que no te ha conocido en la vida. Y a tu compañero, Ponerse en el Lugar del Otro, tampoco. Por eso os quiero hacer este reconocimiento público. Porque todo el mundo sepa como sois de importantes en mi vida y como me ayudáis a enfrentar las dudas y angustias que se me cruzan por delante. Lamento haberos hecho poco caso en el pasado, pero os prometo que no volverá a suceder. No tengo ninguna intención de dejaros más de lado porque entre otras cosas, me he dado cuenta de que me hacéis la vida mucho más fácil, más llevadera, más tranquila y me puedo sentir más en Paz.
Gracias por estar ahí, ¡os debo una!
4 respuestas
Qué gran verdad!!!.
Realmente me has emocionado.
Es una buena ecuación esa de Sentido común+empatía+instinto=equilibrio para sobrellevar una situación así, tan difícil para las dos.
Cogiendo un poco de esa empatía, sé que a nosotros en esa situación también nos resultaría complicado acoplarnos pero con un poquito de esa buena combinación todo sería más llevadero.
NO es fácil pero es el mejor camino.
Mucho ánimo!
Bona fórmula!
La tindré en compte!
Que bonito y cuanta razón!!! Un besazo